Junio – Luigi Bosca Gala I

Esta vez, y recordando la primera reunión, el pan (ingrediente más que importante) lo adquirimos en Las Delicias de Caballito, junto a sus clásicos palitos de queso que estaban calentitos. Debemos confesar que caimos en la tentación y liquidamos unos cuantos palitos en el auto.
Llegamos, comenzamos la preparación de la tabla pero Maxi, cuchilla en mano, se dió cuenta que estaba todo menos los quesos (que nos los habíamos olvidado en el auto). Resuelto el tema, se iniciaron los cortes. El camemberg se cortó en triángulos y el resto en cubos. Las lenguas de crudo fueron enrolladas y como adicional, y pasando a ser un clásico, agregamos rodajas de muzzarella con tomate secos y albahaca fresca.
Las aceitunas en sus bowls, el pan en una panera, los palitos de queso en otra, el mantel en la mesa, y todo listo para iniciar.
A continuación se hizo el descorche y la sesión obligada de fotos para dejar registrado el momento.

Observamos en Gala I un rojo rubí, con un aroma a frutas rojas, un toque de madera y un poco especiado. En boca predominó el sabor a ciruela sutilmente avainillado. En resumen un vino muy corpulento y de sabor intenso.

El camemberg, tal como nos había anticipado Alejandro (un colega nuestro) resultó muy fuerte y prácticamente no lo comimos.El queso de cabra al vino tinto tenía un sabor especial, muy distinto a los que habíamos probado hasta ahora. El gruyerito impresionante y en combinación con el crudo, recordó el viejo y querido especial de Paulín: la baguette de crudo y gruyere. El madrigal fue un descubrimiento ya que se trata de una pasta semi dura y extremadamente sabrosa.

Ya con la última copa servida, y aprovechando que se trataba de un viernes, pudimos extender la velada y fuimos en búsqueda de la guitarra para improvisar algún Rock and Roll y Blues que Maxi se encargó de dejar registrado con la camarita de su celular (luego publicaremos los videos).

Nuevamente Maxi trajo la cafetera Nespresso y como broche final nos tomamos un express (Maxi eligió Indraya, y y uno fuerte de edición limitada llamado Tanzaru) y los acompañamos con unos mini brownies bañados en chocolate que la rompían.

No queremos cerrar la publicación sin agradecer a Rafael por habernos conseguido el Gala I.

Ahora si, hasta el mes que viene.
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