En el marco del lanzamiento oficial de Chiuso Catering y gracias a la gestión de Natalia Álvarez, directora de NA! Consultora, me pude acercar a Chiuso Restaurante para hablar con su dueño, Mariano Akman, y poder conocer de qué se trata el restaurante en sí y esta nueva unidad de negocio.
Chiuso Restaurante es un restaurante de cocina italiana con capacidad de 50 cubiertos, que ubicado en pleno Retiro (San Martín 1153) ya próximo a cumplir 5 años en Octubre de 2019. Esta zona, al medio día, puede llegar a tener unas 15 mil personas trabajando alrededor. El restaurante abre mediodía y noche, y es siempre a la carta, no cuenta con menú ejecutivo pero trabajan con porción y ración (la ración es siempre un poco más que media porción).
Mariano Akman, propietario y creador de Chiuso, es segunda generación en el ramo gastronómico ya que sus padres en Argentina se dedicaron al cátering y a escuela de gastronomía. Es sommelier formado en Barcelona y ya tiene 10 años de experiencia trabajando siempre al frente en restaurantes de cocina italiana; previamente en 2 restaurantes en Belgrano y actualmente en Chiuso. La inclinación por este tipo de comida en particular, confiesa, que es más bien por gusto y porque la comida italiana es muy diversa, se cuenta con mucho para hacer y tiene versatilidad muy amplia. Hoy es posible seguir aprendiendo las técnicas y ya no es tan lejano el estilo de comida de Italia.
Según Mariano “servimos cosas comunes hechas con un poco de onda”, dentro de un estilo de cocina buscan una identidad pero no es «estrictamente italiana».
No respetamos las regiones, reversionamos cosas que nos gustan y las adaptamos a nuestro paladar y nuestra forma de comer. Nos gusta la pasta, el arroz, la carne y el pescado y especialmente la versión de como lo hacen en la península italiana, que es muy amplia.
Desde su restaurante propone que nos animemos a otras cosas en cuanto a la comida: la clave está en abrirse un poquito más y animarse a que alguien prepare las cosas de forma distintas. El cliente puede ver que la carta esta publicada en la puerta: “No estoy luchando por nada en particular, mi trabajo no es enseñarle a la gente a comer sino que se vayan con una linda satisfacción, que lo hayan pasado bien, que el servicio haya sido bueno. Servimos comida de buena calidad hecha con materia prima fresca que ingresa todos los días, todo elaborado acá: el pan, el helado, secamos tomates, hacemos las pastas frescas caseras todos los días y hasta hacemos fiambres actualmente. Todo es muy casero”.
La carta de vinos de Chiuso de casi 80 etiquetas, esta armada por Carlos Vargas, el socio de Mariano, también sommelier y el espíritu de la carta es contar con vinos no convencionales y de buena relación precio calidad.
Y es verdad lo que Mariano afirma y se puede comprobar en la calidad de sus platos, los detalles están cuidados.
Chiuso Catering
Ahora lanzan el servicio de catering, para que el cliente que ya los conoce pueda «llevar» Chiuso a su evento. Este nuevo servicio cuenta con dos opciones: cóctel o a la mesa y luego obviamente se tiene en cuenta para el presupuesto, la duración del servicio que se quiera contratar. Esto permite a Chiuso brindar soluciones a cuestiones de la vida cotidiana: festejar un cumpleaños, reuniones y todo tipo de eventos. El servicio de catering es un proyecto que se inició hace 3 años:
Las cosas llevan tiempo y queríamos que salga bien. Queremos que el cliente vuelva porque haya tenido una buena experiencia.
Durante esta experiencia, mientras Mariano me contaba todo esto, pude degustar los siguientes platos:
Para arrancar: junto con dos negronis pequeños y vino Alpataco Chardonnay 2018 de Familia Schroeder.
- Ensalada de langostinos: langostinos salteados con mix de verdes, palta y morrones asados.
- Burrata con jamón crudo.
- Carpaccio de bife de chorizo con huevo mollet.
Luego llegó el turno de los Antipasti Caliente: acompañado con vino Alma de Rey Malbec 2017 de Bodegas del Carmen
- Polenta grillada con queso brie: sobre una salsa suave de morrones. Muy buena.
- Sopa de zanahoria jengibre con espárragos y crocante de parmesano: el punto de jengibre excelente.
- Gnocci lungo de batatas con mozzarella ahumada y tomate: plato sutil y delicado en boca.
Los principales:
- Ravioles de rosbif con manteca a la salvia: excelente pasta con más que generoso relleno.
- Risotto negro con chipirones: media ración más que abundante y exquisita, a no perderse este plato!!.
- Osobuco milanés: plato típico de Milán que consta de osobuco braseado con una cocción a fuego lento de 3 horas o más macerado con vino tinto y vegetales y va acompañado con un risotto de azafrán.
Los postres: las 2 especialidades de la casa.
- Antes un pre postre de higos bañados en chocolate: delicioso y para preparar el paladar a lo que viene.
- Helado de pistacho: le pregunte si lo vendía por kilo, es excelente, el mejor helado de pistacho que recuerdo haber probado.
- Tiramisú: verdaderamente muy bueno y suave.
Solo me resta agradecer la calidez con la que me recibieron y la profesionalidad y amabilidad de todo el staff, y a continuación les dejo algunos datos de contacto:
Chiuso Ristorante: San Martín 1153 – +54 11 4311 7652. Martes a sábados mediodía y noche.
Chiuso Catering: cateringchiuso @ gmail.com